lunes, junio 26, 2006
La guerra de los formatos (enésima versión)
Pues sí, aquí estamos con una película que ya estamos cansados de ver: dos formatos luchando entre sí. Es el mismo argumento de siempre: hay uno que es mejor en unas cosas, otro en otras, y al final no gana el mejor sino el que gana. El perdedor es siempre el mismo: el consumidor.
Los contendientes ahora son Blue Ray y HD DVD. En Ars Technica analizaron primero el HD DVD que crea Toshiba. Dicen que su estrategia es vender a pérdida porque el aparato se vende por 500 dólares pero lleva dentro cosas como un Pentium 4, varios DSPs, 32 MB de memoria Flash y ¡1 GByte de RAM! Aparte del lector, claro.
Poco después hablaron del lector de Blue-Ray ofrecido por Samsung. Para empezar, vale 1000 dólares (el doble que el otro). Además con la salida HDMI no se veía bien. Una ventaja es que tardaba menos en arrancar: "sólo" 30 segundos. A mí eso me parece una burrada para un reproductor de películas. Pero lo peor no era eso, lo peor era que no es capaz de leer (ni escribir, por supuesto) CDs normales.
Así no vamos a ningún sitio. A ver cuánto tarda el mercado (es decir, otros, por lo que es yo me abstengo) en decidirse por un modelo y cuando empiezan a tener precios asequibles.
¿Cuántos años tardaremos en ver la nueva versión de esta película?
Los contendientes ahora son Blue Ray y HD DVD. En Ars Technica analizaron primero el HD DVD que crea Toshiba. Dicen que su estrategia es vender a pérdida porque el aparato se vende por 500 dólares pero lleva dentro cosas como un Pentium 4, varios DSPs, 32 MB de memoria Flash y ¡1 GByte de RAM! Aparte del lector, claro.
Poco después hablaron del lector de Blue-Ray ofrecido por Samsung. Para empezar, vale 1000 dólares (el doble que el otro). Además con la salida HDMI no se veía bien. Una ventaja es que tardaba menos en arrancar: "sólo" 30 segundos. A mí eso me parece una burrada para un reproductor de películas. Pero lo peor no era eso, lo peor era que no es capaz de leer (ni escribir, por supuesto) CDs normales.
Así no vamos a ningún sitio. A ver cuánto tarda el mercado (es decir, otros, por lo que es yo me abstengo) en decidirse por un modelo y cuando empiezan a tener precios asequibles.
¿Cuántos años tardaremos en ver la nueva versión de esta película?
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